La calesita de Norma es un lugar muy especial que tiene un espacio en el corazón de todos aquellos que alguna vez pasaron por ahí. Allí, donde la música de Carlitos Balá y los dulces caramelos eran parte de la infancia de cada uno de los niños, donde se disfrutaba de la compañía y el cariño de Norma.
La calesita de Norma es sin duda un lugar que guarda muchos recuerdos y emociones para toda la comunidad saltense.
Hoy en día, sin embargo, es solo una ruina triste y sombría. Al pasar por ahí, la tristeza nos invade al ver las maderas viejas tiradas en medio de un espacio público. Es triste pensar que en 2004 la calesita de Norma fue reconocida como patrimonio cultural, pero hoy en día parece haberse quedado en el olvido.
El patrimonio cultural es un conjunto de bienes que forman parte de nuestras prácticas sociales, ya los que se les atribuyen valores que deben ser transmitidos de una generación a otra. La calesita de Norma es uno de esos bienes, y aunque no sabemos qué hacer con ella, estaría bien tener un espacio donde recordar esos años tan felices de nuestra infancia, donde buscar la sortija de la calesita de Norma era uno de los momentos más emocionantes.
Recordemos que hace unos años atrás unos vecinos, trabajadores, profesionales, la pusieron nuevamente en valor, pero el tiempo hizo lo suyo
La calesita de Norma es un lugar lleno de recuerdos y emociones para toda la comunidad saltense. Esperamos que algún día se pueda encontrar una solución para mantener vivo este patrimonio cultural, y que siga siendo un espacio donde los niños puedan disfrutar y crear recuerdos que los acompañen durante toda su vida.

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